martes, 28 de junio de 2011

UNA DE ESAS NOCHES CON LUZ

Todo empieza con una cerveza
bien fresca y un vaso helado,
sacas la cámara, y fotografías a
lo mas bonito que tienes al lado.
Tienes que probar luces, velocidad,
diafragma, lo de costumbre.

El vecinito de al lado prepara su petardos,
parece teledirigido, ahora se levanta, ahora
se agacha, ahora se levanta.


El vecinito, espera a que pase
la gente, tira la "cebeta" y sale corriendo,
como nos reímos!
Yo no recuerdo a ver hecho eso de niño,
es que yo era muy bueno, ya lo decía
mi madre, rozando lo tonto.

Le silbo, para que me mire...

Desvío la mirada, y veo la cuchara
que tiraron los del cuarto piso,
menos mal que se fueron, que descanso.

Mientras tanto la vecina, tiende
la ropa con ayuda divina, juega con ventaja.
Miro por aquí...

Miro por allí...

Definitivamente, no lloverá.

Uff, no se, no se,
...y ahora como le digo que
hay unas nubes negras negras.

Y claro, llega la hora de limpiar esas "cebetes"
que explotan en la acera y que son
inofensivas para gente y mortales para las
aceras del barrio. Menos mal que hay gente
del barrio que todavía valen la pena.

Mientras tanto, otros miran
y otros fotografían.

... luego me comí una sepia buenísima.
¿os ha gustado?